Paja mental

Esta mañana he tenido una paja mental, mientras me iba despertando.

Una paja mental es aquella serie de pensamientos que no lleva a ninguna conclusión y que no es productiva, es decir, imaginarse algo que nada tiene que ver con la realidad y jugar con ello.

Me estaba despertando después de mis 5 horas de sueño de rigor y mi mente aún estaba metida en el sueño que acababa de tener, en el que estaba a punto de ir al cine a ver una película de Nicole Kidman y Sean Connery, no pegan nada, ya lo se. Lo más extraño era que parecía ser una película de amor.

He comenzado a imaginar el argumento...

Un hombre mayor acaba de salir de la consulta de su médico, que le ha dicho que su edad es muy avanzada y que es probable que pronto necesite algún tratamiento más para su enfermedad. Nuestro protagonista, algo excéntrico, notablemente adinerado y solitario, va caminando por la calle y se fija en una mujer, es guapa y joven, lleva una chaqueta roja (un color que resalta sobre los tonos grises de todo lo demás que le rodea) con un distintivo: Un anagrama de un barco con las letras "R.R". Mientras él la mira se da cuenta de que ella también le está mirando. Él la sigue hasta que ella sube a un pequeño barco-restaurante, precisamente llamado "R.R". Cuando sube al barco-restaurante, se da cuenta que ella es la dueña del barco, barco en el que hay muchísimos camareros y jefes de cámara, pero ningún cliente. Se acerca a una puerta y oye cómo el jefe de los cocineros habla con ella, comentándole que el negocio va a pique y que debería vender o cerrar antes de que las deudas fueran demasiado grandes. Ella a su vez responde que ese barco es su vida y que por nada lo piensa abandonar.

Él decide bajar del barco antes de que nadie se haya percatado de su presencia, espera a que baje Nicole (espléndida bajada de escaleras mostrando piernas) del barco y le dice que le compra el barco, ofrece una cifra astronómica, y que además se lo dejaría en herencia después de su muerte... tan sólo es necesaria una sola condición.

"Tú."



Ella, al verse entre la espada y la pared, decide aceptar... total... el hombre parece muy mayor y no durará demasiado.

Llegado a este punto los acontecimientos se suceden rápidamente, se enamoran, y llega el momento de la muerte de él.

Aquí es dónde la historia da un giro de 180 grados. Por primera vez aparecen todos los colores en la pantalla (hasta ahora, sólo se había visto la chaqueta roja de ella) y se ve a si mismo tirado en el suelo, al lado de unos cartones, cubierto de harapos, va girando la mirada y ve a su lado una fuente donde unos niños juegan con un barco terriblemente parecido al de su chica, más allá una mujer que lee una revista de moda donde aparece Nicole Kidman con una chaqueta roja espléndida, y cerca de él mucha gente que le mira y murmura. Hasta que un hombre aparece corriendo.

"Soy médico, este hombre padece esquizofrenia".

Todo había sucedido sólo en su mente, ser rico, conocer a la chica, enamorarse...

¡Tachan!


A veces es bonito vivir en un mundo imaginario...